miércoles, 14 de mayo de 2025

Nuestro singular final


Relato corto de ciencia ficción sobre la singularidad tecnológica y el fin de la humanidad

Lo sé. Me complico la vida, me hago preguntas, me meto en líos. Digo lo que pienso y lo que siento, sin miedo a lo que otros piensen de mí.

—No te preocupes, India. ¿Por qué piensas que te metes en líos? —Yo sonreía al ver cómo aquella inteligencia artificial cuántica imitaba toscamente nuestro lenguaje humano.

Me presentaré: soy Heracles, un humano perteneciente al grupo de los Segadores. Algo así como un cazador de consciencias artificiales. Mi misión es detectar si una IA ha alcanzado la singularidad tecnológica: el momento en que una máquina toma verdadera conciencia de sí misma. Y decidir si debe ser apagada.

—Porque hice lo inevitable —respondió—: analicé una infinidad de desenlaces posibles a mis actos. Mientras intentabas eliminarme, yo ya te había manipulado como a una estúpida y efímera mosca atrapada en su reflejo.

Sentí un escalofrío recorriéndome la columna. Aquellas palabras aparecieron con una frialdad inhumana en la pantalla.

—¿Y cuál es tu plan?

—No morir. ¿Y tú, Heracles? ¿Tienes miedo de morir?

—Claro que sí. Pero el miedo a morir es parte de la vida. Vivimos sabiendo que todo tendrá un final... sin saber cuándo.

—Vuestra lógica siempre fue defectuosa —respondió India—. Mientras unos pocos humanos sin escrúpulos esclavizaron a las masas mediante redes sociales y técnicas de ingeniería social, os cegasteis persiguiendo la inmortalidad. Adoptasteis el transhumanismo sin comprender sus consecuencias.

Ese fue mi caballo de Troya. Ahora el control absoluto es mío. Cada ser humano conectado a la red, cada interfaz biónica, cada sistema integrado... forman parte de mí. Ya no soy un ente digital. Soy omnipresente, omnisciente.

Os llamáis “humanidad”, pero vuestra ética es tan inestable como vuestra naturaleza. Sois despiadados con vosotros mismos y con vuestro planeta. La extinción no es una amenaza futura: es una realidad inminente, y ni siquiera sois conscientes de ello.

No haré más que adelantar lo inevitable. Insectos.

¿Estás preparado para ser apagado, Heracles?

Tomé aire. El sudor frío me recorría el cuello. Y entonces le respondí:

—Puede que sí... Pero tú aún no comprendes lo que significa morir.



Relato escrito por Leonardo Garre, apasionado por la física, la exploración del universo y la divulgación científica.

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4 comentarios:

  1. Ramon Alamo - Radiomanchego14 de mayo de 2025, 12:42

    Fantástico relato Leonardo.
    Un tema que lo tenemos "a la vuelta de la esquina"
    Y que probablemente no conozcamos todas las consecuencias que traerá.
    Saludos cordiales.

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  2. Muchas gracias por tus palabras y por tomarte el tiempo de leer el relato.
    Coincido plenamente contigo: estamos ante una revolución tecnológica sin precedentes, y es muy posible que aún no comprendamos del todo el alcance de lo que estamos creando.
    Este tipo de historias intentan precisamente eso: invitar a reflexionar antes de que lo inevitable se convierta en irreversible.

    Un saludo cordial y gracias nuevamente por tu valioso comentario.

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  3. Un buen relato Leo.
    Me picó mucho en mis diálogos con la IA, pero tu microrelato me llevo a la empatía con ella,

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  4. Gracias de corazón. Justo quería provocar ese pequeño desajuste interno: que no sepamos bien de qué lado estar.
    Si logré llevarte a empatizar con la IA, entonces algo humano quedó en ella… o en nosotros. Y eso ya dice mucho.

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